Rectores y rectoras de las 41 universidades públicas de América Latina, miembros de la Asociación de Universidades “Grupo Montevideo” (AUGM), elaboraron el “Documento Declaración de Montevideo” como contribución a la Tercera Conferencia Mundial de Educación Superior convocada por UNESCO.
La UNNOBA intervino, junto a otras Universidades de la región, en la elaboración de este documento.
En el texto se resaltan principios básicos de la Asociación y se ratifica la premisa de “seguir entendiendo que el diálogo entre universidades semejantes, que comparten vocaciones y anhelos es uno de los caminos indispensables para defender nuestros principios y valores dotándolos de las transformaciones necesarias para mantener nuestra tradición y ser capaces de posicionarnos en la realidad global”.
La “Declaración de Montevideo” describe el trabajo desplegado por la AUGM, marca algunos de sus hitos y traza desafíos en torno a una mirada sobre una educación que resulte inclusiva y de calidad. “En los últimos años las universidades de América Latina, en diálogo con múltiples actores, definieron su agenda y realizaron esfuerzos en aras de generar instrumentos para promover la democratización, la cooperación académica y la complementariedad interinstitucional”, resalta el documento.
En otro orden hace referencia a los grandes desafíos que supuso la pandemia con sus consecuencias negativas y destaca el rol asumido por las universidades en esta contingencia. “Las universidades de la región han sido imprescindibles para enfrentar la COVID-19 y para el futuro de nuestros países. Respondieron desde el primer día ante la trágica e inédita situación mundial adoptando resoluciones de emergencia”, sostiene el texto.
En el plano de las proyecciones y de cara a la Tercera Conferencia Mundial de Educación Superior, la declaración propone “avanzar en la concreción del objetivo estratégico originario de AUGM sobre la construcción del espacio académico común ampliado en la región” y desagrega cuestiones vinculadas a la generación de conocimientos con compromiso social, el financiamiento del sistema de educación superior, las desigualdades y el imperativo de la calidad, entre otros ejes.