En el día de ayer le propuse públicamente al Presidente reunirnos para trabajar en conjunto, coordinar esfuerzos y abordar este tema tan complejo con seriedad. El Presidente decidió responder a esa invitación, pero no lo hizo ni con convocatoria ni propuestas concretas: lo hizo desde Twitter con un mensaje cargado de violencia y amenaza. En su mensaje amenaza con intervenir la Provincia.
Algunos asocian este virulento mensaje con un intento de tapar y ocultar el escándalo de la estafa de corrupción internacional de la que es protagonista, otros sostienen que es para ocultar el nombramiento por decreto de dos jueces en la Corte Suprema, y otros afirman que lo hace simplemente para ocultar el enorme daño que está haciendo sus políticas. Yo no sé cuál es el motivo, pero sí sé la enorme gravedad que tiene amenazar con una intervención a una provincia Argentina con sus autoridades electas en elecciones.
Como ya lo he dicho, el incremento de la violencia y crimen está hoy asociado al narcotráfico. La Provincia, como se sabe, no produce droga, para llegar a nuestros barrios tiene que recorrer más de 1.000 km atravesando fronteras y eso es responsabilidad del Gobierno nacional. Milei es el principal responsable del narcotráfico.
La Provincia no tiene un código penal, ni juvenil bonaerense, son leyes nacionales que determina el Congreso y que, además, atañen a las decisiones de fiscales y jueces. Poner presos a personas o darles la libertad no lo resuelve un gobernador. De todas formas, tratándose de cuestiones nacionales, si hay discusiones sobre el Código Penal de menores, juveniles, estamos dispuestos a abordarlas.
El problema acá no es de las leyes, es de la Justicia y cómo se aplican las leyes, cosa que tampoco corresponden al Poder Ejecutivo. Nuestra policía lo había apresado: tenía que estar preso, estaba libre y asesinó. Eso tenemos que discutir.
Quedó claro que el Presidente no solo no va a colaborar de ninguna manera, sino que dio un paso más: en su mensaje, por primera vez, avanza con el sueño autoritario de intervenir una Provincia
Los gobernadores e intendentes no son los empleados del Presidente, fueron elegidos por sus pueblos, tienen mandato y tienen la obligación de defender los intereses de sus provincias, municipios, y los derechos de sus habitantes. Estamos acá para defender los derechos que quieren aplastar: va a hacer falta la unidad para defender la democracia.
Quiero agradecer las expresiones de repudio al mensaje de Milei y el apoyo que recibimos de gobernadores, intendentes, dirigentes y partidos políticos, tanto de nuestro espacio como de otros signos políticos. Más allá de las diferencias, hay consensos que no se tocan: democracia, federalismo y constitución. Hoy quedó muy en claro que el Presidente que no va a atropellar la democracia y que no va a atropellar a nuestra Provincia.
Quiero informar que instruí al Asesor de Gobierno, para que junto al fiscal de Estado de la provincia de Buenos Aires, formulen una denuncia penal para que se investigue la posible comisión de delito contra el orden constitucional y los poderes públicos de la Provincia.
Por último, pese a todo lo que dije, le reitero al Presidente la invitación: le pido que no sea cobarde, que deje el Twitter y los delirios autoritarios y se reúna a trabajar con seriedad en un tema tan importante y complejo.
