Según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en junio los precios de los agroalimentos se multiplicaron por 3,5 veces del campo (origen) a la góndola (destino). Es decir, al igual que durante el mes de mayo, el consumidor pagó $3,5 por cada $1 que recibió el productor.
En promedio, la participación del productor explicó el 25,2% de los precios de venta final. La mayor participación la tuvieron los productores de huevo (50,5%), mientras que la menor fue para los de limón (8,3%).
La brecha en los productos frutihortícolas y en los ganaderos
IPOD frutihortícola: del campo a la góndola, los precios de las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta IPOD se multiplicaron por 5,1 veces en junio.
IPOD ganadero: por los 5 productos y subproductos ganaderos que componen la canasta IPOD, el consumidor abonó 3 veces más de lo que recibió el productor.
Tanto el IPOD frutihortícola como el ganadero se mantuvieron relativamente estables con respecto al mes de mayo.
Mayores y menores brechas IPOD de junio
1. Productos con mayores brechas IPOD mensuales
El limón (12,1 veces), el zapallito (8,1), la manzana roja (7,2), la naranja (7,1) y la zanahoria (6,8), fueron los cinco productos que presentaron mayor diferencia entre los precios de origen y destino.
Por tercer mes consecutivo, el limón fue el alimento con mayor brecha entre el productor y el consumidor. Sus precios aumentaron 6,3% en origen y disminuyeron 10% en destino. Es decir, a pesar de que la diferencia campo-góndola continúa en descenso (de 14,8 veces en mayo a 12,1 en junio), sigue siendo el producto con mayor disparidad.
Con respecto al zapallito, sus precios subieron tanto al productor (2,1%) como al consumidor (32%). Lo mismo sucedió en la zanahoria, producto que presentó un aumento del 2,1% en origen y 2% en góndola.
Otro fue el comportamiento de la manzana roja, donde se observó una baja mensual del 12,2% en origen —por las heladas tardías y la sequía, inclemencias climáticas que afectaron al Alto Valle y disminuyeron la calidad de la fruta— y 1% en destino; y de la naranja, con una disminución de precios del 0,1% en origen y 19% en góndola.